Home 5 Información 5 Qué hacer con el hueso del jamón. Consejos de aprovechamiento

Qué hacer con el hueso del jamón. Consejos de aprovechamiento

Quienes consumen de forma habitual jamón ibérico, saben que es un producto que se disfruta desde el principio hasta el final. Y no solo nos referimos a las lonchas, sino también al hueso, cuyo sabor puede hacer que muchos platos cambien por completo. Si no sabes de lo que estamos hablando, ¡continúa leyendo! Jamás volverás a tirar el hueso del jamón con los consejos de uso que te vamos a dar.

pata del hueso del jamón serrano

Cómo cortar el hueso del jamón

Lo primero y primordial que debes hacer es cortar bien el hueso del jamón. Para ello, es fundamental que retires toda la carne que pudiera haber quedado. ¡Y no la tires! Porque también podrás sacarle mucho partido, más del que puedas creer en un primer momento. Es ideal para platos como cocido, e incluso para preparar un buen caldo de sopa, puesto que su sabor está muy concentrado y hará que adquiera mucha más intensidad.

¿Ya tienes totalmente limpio el hueso? En ese caso, tendrás que proceder a cortarlo en trozos de aproximadamente 8 centímetros. Necesitarás una buena sierra para que los cortes sean lo más limpios posible. Si no dispones de las herramientas en tu hogar, algo totalmente normal, siempre podrás bajar a tu carnicería más cercana y pedir que te hagan ese favor.

Cómo guardar y conservar los huesos

¿No quieres usar los huesos justo en ese momento? No te preocupes, porque hay ciertas formas de conservación que te ayudarán a mantenerlos en buenas condiciones. Si lo vas a usar en los próximos dos o tres días, bastará con que los mantengas envueltos en papel film en la nevera. Lo ideal es que envuelvas cada hueso por separado, puesto que así podrás ir sacándolos de forma individual para aprovecharlos al máximo.

¿Se pueden congelar?

Si tienes más huesos de los que crees que podrás usar en unos días y quieres conservarlos el máximo tiempo posible, lo ideal es que optes por la congelación de estos. El procedimiento es el mismo: lo envuelves en papel film y los congelas de forma individual. De esta forma, podrás ir sacando de uno en uno los huesos y así no desperdiciarás absolutamente nada.

Aunque te pueda parecer extraño en un primer momento, debes saber que no pasa nada por congelar los huesos de jamón. No pierden su esencia, no pierden su sabor y en ningún momento sentirás que se han echado a perder.

Posibles usos del hueso del jamón

¡Y pasamos a la parte más interesante! ¿Qué podemos hacer con estos huesos para aprovecharlos? ¿Qué platos son los más interesantes? Esto va a depender mucho de tus gustos y de tu imaginación, aunque nosotros te vamos a dar algunos consejos para que disfrutes del jamón al completo.

En primer lugar, y como ya hemos señalado, no hay nada como aprovechar estos huesos para hacer un caldo. Para ello, lo único que tendrás que hacer es añadir el hueso en el proceso de cocción. Al ir hirviendo el agua, el hueso acabará por soltar su sabor y te permitirá disfrutarlo al máximo. No necesitarás más que agua, huesos de jamón, una cacerola y un colador. Con los huesos bien preparados, los pondrás a hervir en el agua hasta que estos comiencen a soltar sus impurezas. Es importante que elimines estas, puesto que su sabor puede no ser agradable.

Tras haberlo limpiado bien, volverás a cocerlos en mucha agua. Es importante que dejes que se cuezan durante, como mínimo, dos horas. Durante este tiempo, tendrás que ir retirando la espuma blanca que sueltan. ¡Y ya estará listo el caldo para usarlo en cualquier receta que te apetezca! Si buscas un sabor más concentrado, prolonga el tiempo de cocción durante más de tres horas. Aunque, eso sí, ten cuidado porque puede que quede demasiado salado.

Ya tenemos caldo de jamón: ¿qué hacemos ahora?

¿Tienes ya el caldo listo? Pues debes saber que tienes entre tus manos una auténtica joya de la cocina. Vas a poder usarlo para hervir verduras, por ejemplo, dándoles a estas un sabor muy peculiar. Si no te gustan demasiado, ¡esto hará que quieras comerlas todos los días! Lo mismo sucede con la pasta, puesto que podrás usar este caldo o bien para hacer una salsa o bien para hervirla. Sea como sea, le dará un toque totalmente diferente.

Con la carne que restaba de los huesos del jamón también podrás hacer muchos preparados. Lo más habitual es hacer croquetas de jamón, pero también podrás añadirlas al cocido e incluso hacer carne guisada. Al final, el límite será tu imaginación. Lánzate a descubrir nuevos preparados y disfruta del jamón en todo su esplendor.

▶️ Descubre todas las propiedades del jamón serrano